Es importante tener claro que el Coaching no es consejería, consultoría o psicoterapia. Es un proceso de acompañamiento, en el que por medio las preguntas correctas y respuestas honestas, la persona se hace consciente de su propia situación y de las creencias que lo han llevado a esa posición, para permitirse avanzar en un camino hacia donde pueda ver la vida y lo que está experimentando, desde una perspectiva distinta y por ende, desde un lugar diferente
Es una metodología, no es sólo un plan de acción. Desde el Coaching Ejecutivo se trabaja en el “hacer”: mejora de resultados, establecer metas, revisión de recursos, entre otros; y también se trabaja en el “ser”: reconocer y aceptar luces y sombras, toma de conciencia sobre creencias, soltar el control y aprender a delegar.
Cuando en un equipo existen limitaciones en su desarrollo, es posible potenciar su crecimiento y rendimiento colectivo, por medio de un proceso de coaching, que los acompaña a descubrir las dinámicas que como sistema, están impidiendo o limitando el logro del objetivo que los define como equipo.
